martes, marzo 30, 2010

La rosa.


Hace ocho años alguien dejó esta rosa sobre mi mesa de la oficina en un gesto anónimo. Cada vez que se cierra permanece a oscuras esperando mi vuelta en las noches, en los fines de semana o en las vacaciones. Como todo ser vivo muestra el paso del tiempo, para despedirme estos días  le dejo este pequeño fragmento de Marguerite Duras:

"Todo el mundo dice que de joven era usted más hermosa, me he acercado a decirle que en mi opinión la considero ahora más hermosa que en su juventud..."

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2 comentarios:

jaio dijo...

¡Qué bello post!

Miguel L. Vidal dijo...

A veces lo más bello es lo real.

Gracias, Jaio.