miércoles, abril 04, 2012

Deberes y apoyos externos.

Ayer publicó un reportaje El País en su sección de Vida¬Artes un reportaje sobre los deberes y apoyos externos educativos a propósito de la huelga de padres en Francia  contra la degradación de de la escuela primaria francesa, país donde esta práctica está prohibida aun se siga practicando.
En el reportaje se publican datos del Instituto de Evaluación del estudio del sistema estatal de indicadores, enlazo la página del estudio donde se encuentran los gráficos publicados en el artículo  que no son accesibles en la versión digital. Si estos se refieren a Primaria, imagino que en las etapas posteriores serán todavía más llamativos.
Este dato, la necesidad de reforzar externamente la actividad escolar debería ser tomado muy en serio, como indicador de la calidad y adecuación del sistema de enseñanza: primaria, obligatoria y bachillerato. Sobre todo en estos últimos, donde el éxito escolar está ligado a apoyos destinados a cumplir la finalidad real, preparar los exámenes.
La fuerza de la costumbre, nos hace ver como natural, o lógico, aquello que debería ser excepcional, especial o al menos no tan habitual. 
Coincido en el final del artículo, con que estamos instalados en la cultura del stress:  "Preguntado hace unas semanas el catedrático de Sociología de la Complutense Julio Carabaña sobre la cultura del esfuerzo, comentaba con algunos compañeros que, en realidad, en la escuela española lo que hay hoy es “una cultura del estrés”. “Cuando yo era estudiante, no me ponían deberes; ahora los alumnos están saturados”, afirmaba".

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2 comentarios:

Guillermo dijo...

"Preguntado hace unas semanas el catedrático de Sociología .... Cuando yo era estudiante, no me ponían deberes" --> ¿A qué escuela o instituto fue este señor?
"... en la escuela española lo que hay hoy es “una cultura del estrés” --> ¿En la escuela o en la sociedad y en todo el ámbito escolar? Además de los deberes ¿qué parte de responsabilidad tendrá en ello las ingentes cantidades de tiempo que hay que perder en centrar la clase (cosa inconcebible en nuestra época)? ¿Y qué parte de culpa tendrán en dicho estrés las numerosas actividades extraescolares (también desconocidas en nuestra época)?

Miguel L. Vidal dijo...

Lo de centrar la clase me sugiere el término desinterés. El papel de la educación ha cambiado en los últimos 30 años, la secundaria ya no va dirigida a unas élites, ni la sociedad es la misma, ahora es mucho más compleja, cuando más se resista a adaptarse más problemas arrastrará, y más problema arrastrará.
Lo mismo ocurre con el papel que ocupa en la sociedad la educación reglada, cada día son más los aprendizajes que se realizan fuera del sistema educativo, los que se denominan informales, tan necesarios como formales, de ahí la importancia de las actividades extraescolares.
El sistema no cambia si no cambiamos los profesionales, necesitamos reubicarnos, ser conscientes de lo que demanda la sociedad. No pueden suceder cosas, como el caso del alumno que se ausentó convocado a una final nacional al más alto nivel de su categoría, y la tutora no sólo no mostró actitud colaborativa, amenazó a los padres con las posibles consecuencias académicas. Actitudes así nos dejan fuera de nuestro tiempo.

Gracias, Guillermo, por tu comentario, cada día abundan menos en los blogs